27 noviembre 2013

26º SEMANA LITEL PIPOL

Domingo por la mañana: nos levantamos, desayunamos, Pablo lee un ratito y hace una hoja de su libro de preescritura. Miramos por la ventana y el día está estupendo, luce el sol y queremos aprovecharlo  ¿Pero que podemos hacer? ¿Dónde podemos ir? Pablo lo tiene claro, quiere ir al parque de los patos, así que nos vestimos y salimos a dar un paseo. Allí corrieron, jugaron, se arrastraron, se mojaron... y yo disfruté fotografiando sus momentos que aquí os muestro.

Todos, de pequeños y no tan pequeños, nos hemos deslizado por una rampa (de cualquier superficie), con la consiguiente consecuencia: culera de los pantalones verde, marrón, negra o de cualquier color. Eso fue lo que hicieron estos dos pequeñajos. Se lo pasaron pipa, menos mal que después la lavadora se portó bien y los dejó impolutos. 


Pero no me negareis que no es un juego agotador, subir-bajar-subir-bajar... así que una pequeña pausa vino genial para tomar un tentempié, relajarse mirando como caen las hojas en el agua de la laguna y que mamá aprovechase para hacer la foto protagonista de la semana, la foto LITEL PIPOL:



Pablo tardó algo más en descansar, aunque le llegó su momento, y como no, acompañado de sus inseparables palos. Creo que dentro de 20-30 años, uno de los recuerdos que tendré de su infancia será su relación con todos los palos, varas, ramas... que encuentra en el camino. 


Una vez relajados y con el estómago un poco más lleno, toca beber agua. Pablo no quiso beber de la botella y prefirió irse a la fuente, menudo descubrimiento para Álvaro, su cara era de plena felicidad y si no mirad:



Se mojó los puños, la cara, el pelo... ¿Alguien podría decirle que no lo hiciese viéndole tan feliz? yo no fui capaz. Por supuesto, sólo le dejé un ratito y le quité el abrigo para que no se lo mojase.


Cuando creí que era el momento de abandonar el juego, seguimos con nuestro paseo y entonces nos encontramos con cantidad de hojas en el suelo. No podíamos irnos sin hacer unas fotillos típicas otoñales.


Y tras finalizar nuestro paseo, estábamos listos para irnos a casa y comer la paella que nos estaba esperando.

Os recuerdo la dirección del blog de LITEL PIPOL, donde os podéis deleitar de 28 fotografías llenas de la ternura que transmiten los niños y del amor que desprendemos sus padres:


6 comentarios:

  1. Que fotos tan bonitas Cris,que guapos estan los dos vestiditos iguales... me encantan las de las hojas!! Ese parque de los patos es estupendo.. la próxima nos apuntamos, aunque terminemos con la culera hecha un zarrio! jajaja

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    1. Pues cuando querais veniros para acá. Organizamos un finde en un plis plas.
      El parque es una maravilla y no está nada explotado, una lástima.

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    1. Muchas gracias Cristina, que voy a decir yo mas que tienes toda la razón jajaja

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  3. Qué fotos más bonitas Cris!!! Y qué rico Álvaro riéndoseeeeee Estásn guapísimos!!

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    1. Sólo tengo una foto riéndose, pero se lo pasó genial. Yo creo que sabía que estaba haciendo alguna travesura y eso le gustaba.

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